Encaramado en lo alto de la sierra de Tramuntana, protegida por la UNESCO, este encantador pueblo suele ser considerado el más bello de España por su exuberante naturaleza verde y sus casas de color terracota. Fornalutx rezuma un atractivo rústico que atrae a los visitantes que vienen a admirar el pintoresco entorno y el rico patrimonio cultural, muchos de los cuales pronto deciden prolongar su estancia.
Romántico e irresistiblemente bello, este pintoresco pueblo sólo tiene unos 700 habitantes, pero lo que le falta a Fornatlutx en tamaño, lo compensa sin duda en riqueza histórica y cultural.
Un lugar perfecto para unas vacaciones románticas o familiares, Fornalutx está rodeado de abundantes cítricos que dejan un olor fragante en el aire, que da un aroma característico al pueblo.
Este oasis milenario fue originalmente un asentamiento árabe y aún conserva edificios bien conservados que datan del siglo XIII, cuando se produjeron las conquistas catalanas. A menudo galardonado por su estado de conservación, Fornalutx es el lugar perfecto para disfrutar de una auténtica experiencia mallorquina en un entorno sublime que apreciará para siempre.
No olvide cargar su cámara de fotos, cada rincón de este encantador pueblo es una toma perfecta. Disfrute de un paseo por las calles donde el tiempo se detuvo y no deje de visitar la iglesia gótica. Verá una fusión de elementos barrocos y góticos en la impresionante capilla ornamentada. Cuando esté listo para disfrutar de un refresco en forma de cóctel o de un café expreso, la plaza de España cuenta con numerosos cafés perfectos para una perezosa pausa vespertina. Los cafés suelen estar ubicados en casas antiguas con terrazas con olivares que se suman al atractivo general de este impresionante pueblo de color canela.
Para una comida típica mallorquina, puede reservar una mesa al aire libre en el restaurante Molón, donde podrá admirar las impresionantes vistas mientras se sumerge en una deliciosa cocina. Para los veganos, los vegetarianos y los que se preocupan por su salud, Re Organix ofrece opciones sin gluten y superalimentos en un encantador jardín con un personal muy amable.
Si le apetece aprender un poco más sobre las coloridas tradiciones baleares, una visita al museo etnográfico Can Xoroi es una necesidad absoluta.
